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Por Marcelo Cafferata

Christopher Durang es un dramaturgo nacido en el Off-Broadway que, en este caso con “Vanya and Sonia and Maya and Spike” reúne un grupo de personajes chejovianos en una comedia absolutamente inusual con un elenco deslumbrante. “PARA MI, PARA VOS”  -así fue traducido el título original- se para lejos de la mordacidad y la acidez de otro de sus textos, “Carcajada Salvaje”, (estrenada por Verónica Llinás y Darío Barassi) para plantear un relato más sensible e intimista, sin perder el buen humor y el tono de comedia.

Masha (Soledad Villamil en un triunfal regreso a los escenarios) es una reconocida actriz de cine y televisión que vuelve a la casa familiar donde han quedado sus hermanos Vanya (Boy Olmi) y Sonia (Laura Oliva, nuevamente un torbellino en escena) luego de la muerte de su padre. Ella irrumpe en esa quietud familiar campestre junto con un nuevo novio aspirante a actor mucho menor que ella, un verdadero sex toy que, liviano de ropas, se pasea por toda la casa despertando algunos bajos instintos dentro de la convivencia.

Hay una vecina, la bella joven Nina (Ailín Zaninovich), aspirante a actriz que se entrecruza entre los destinos de la casa y completa este grupo de personajes, Cassandra (increíble transformación de Paula Ransenberg), la señora de la limpieza que tiene visiones y conexiones con presentimientos sobrenaturales , clara referencia mitológica de quien tiene el don de la profecía.

El texto de Durang es un típico producto ganador de los elogios de Broadway donde subyace, bajo el tono de comedia, un diálogo permanente con la obra chejoviana con un seductor mix de referencias intelectuales y un ritmo ágil y sostenido. Si bien esta mezcla es seductora, los rasgos melancólicos y estáticos propios de las criaturas chejovianas, seres que se pasan la vida esperando un cambio que parece no llegar, atenta en ciertos tramos con la propuesta de comedia delirante donde la obra crece.

Aparecen de “La Gaviota” esos personajes encerrados en una casa de campo entre los que está Nina, una joven deseosa de triunfar en el teatro en contrapunto con otras actrices ya consagradas. De “Tres hermanas” aparece aquella hermana soltera que ve discurrir su vida sin posibilidad de encontrar una pareja o de “El jardín de los cerezos”, el tema de la venta de la hacienda, que en este caso se traduce en la llegada de Masha a la casa familiar para una potencial venta de la vivienda. Finalmente de “Tío Vanya”, el texto toma pinceladas que se imprimen en los personajes abatidos, plenos de tristeza que sienten, en cierto modo, que su vida ha sido un fracaso sin ninguna posibilidad de cambio.   

Durang arma un mix de estas obras ya clásicas de la dramaturgia contemporánea y sin olvidar los conflictos profundos que atraviesan los personajes, le imprime un toque de comedia vodevilesca que en la adaptación porteña está un poco más contenido que la versión de Broadway (con Sigourney Weaver y David Hyde Pearce a la cabeza) y cuya adaptación salpica con algunas pocas referencias locales.

La dinámica puesta a cargo de Héctor Díaz se apoya fundamentalmente en un elenco preciso y afinado para un texto que pasa de algunos momentos agridulces a escenas de comedia alocada. El regreso de Soledad Villamil al teatro la muestra nuevamente como una actriz con gran presencia escénica con un don para la comedia sofisticada que le sienta muy bien.

A su lado, Boy Olmi como Vanya tiene, a su cargo, las partes más comprometidas del texto que le permiten ir construyendo lentamente a su personaje.  Ailín Zaninovich como Nina y Tupac Larriera como el juguete de Masha, dinamizan el conflicto de estos hermanos con la fuerza con la que irrumpen en la historia, y ambos aprovechan sus participaciones, sobre todo Larriera jugando con esa imagen de objeto sexual que le permite un desparpajo en escena que potencia el ritmo de comedia.

Si bien el elenco es compacto y no tiene ningún desnivel, por las criaturas que propone Durang en el texto original y por la locura con la que condimentan sus personajes, los trabajos de Paula Ransenberg y Laura Oliva (a quienes pudimos ver en esta misma temporada en “Laponia” en personajes tan diferentes) merecen ser destacados. Ransenberg compone una criatura jugando todo el tiempo con su costado más bizarro y acierta en los diferentes tonos que habitan su Cassandra. Oliva sabe cómo disparar el texto, como poner las pausas y manejar los silencios para que el humor y la carcajada se instalen en escena, y lo hace como es habitual en ella, con sumo histrionismo y su propio carisma.

PARA MÍ, PARA VOS” es una comedia diferente, que propone una particular inmersión en los personajes de Chejov con una mirada completamente actual y donde cada uno de los actores y actrices del elenco pueden lucirse y seducir, desde ese lugar, a toda la platea.

PARA MI, PARA VOS

De Christopher Durang

Dirección: Héctor Diaz

Con Soledad Villamil, Laura Oliva, Boy Olmi, Paula Ransenberg, Tupac Larriera y Ailin Zaninovich.

MULTITEATRO TABARIS  – Avda. Corrientes 831 – Miércoles a Viernes 20 hs, Sábados 19.30 y 21.30 hs y Domingos 20 hs.

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