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Por Macelo Cafferata

La novela de Elia Barceló, ”LAS LARGAS SOMBRAS”, una historia cargada de intrigas del pasado que une a un grupo de amigas del secundario a partir de una desaparición que tuvo lugar 25 años atrás, se adapta en formato de mini-serie dirigida por Clara Roquet, guionista de “Petra” “Los días que vendrán” y “10000 km” y que fue ganadora del Goya 2021 por la mejor dirección novel por “Libertad”.

Rita (Elena Anaya) vuelva a Elda, Alicante, para vender la casa de su madre, que ha fallecido recientemente. Este regreso al pueblo de su juventud la encuentra transformada en una prestigiosa directora de cine que actualmente reside en Londres. Varios temas pendientes del grupo de amigas de la adolescencia, vuelven a salir a la luz cuando se encuentre el cuerpo de Mati, una de sus compañeras, que desapareció hace 25 años atrás, en el viaje de fin de curso en Mallorca.

La presencia de Paula (Irene Escolar), la policía a cargo de resolver el misterio de Mati –que es su hermana mayor- remueve todos lo que ha sucedido tiempo atrás y obviamente enfrenta a algunas de ellas, a lidiar con algunos secretos escondidos y el pacto de silencio sellado en ese pasado, que le permitirá a la historia, navegar entre varios géneros: el drama, el policial y el thriller.

El guion irá develando, poco a poco, los vínculos existentes entre cada una de las amigas y Mati, quien en un principio habían presumido desaparecida pero todos los hechos recientes van revelando un potencial asesinato. El grupo de mujeres, que ahora ya han pasado largamente los 40, se construye de una manera funcional a la trama y permite desplegar, dentro de sus distintas personalidades, diversos temas dentro de la trama como abusos,  homosexualidad, problemas de pareja, heridas de la adolescencia, el éxito profesional dentro del complejo mercado de trabajo, los que permiten una mirada plural referenciando una figura femenina fuerte y exitosa. Sin embargo algunas decisiones en el desarrollo de la historia, hacen que se recurra a determinados lugares comunes que transforman a los personajes en figuras estereotipadas que, al quedar en manos de grandes actrices, logran con solvencia poder traspasar algunos tropiezos de la historia.

Dentro del gran elenco de “LAS LARGAS SOMBRAS” Elena Anaya encabeza un verdadero dream team  de actrices españolas de primer nivel acompañada por la ya mencionada Irene Escolar junto a  Belén Cuesta, Marta Etura, Itziar Atienza y un papel menor pero muy potente para Ana Rayo.

Roquet sabe sacar provecho de cada una de ellas, dejando que la historia transcurra pero que cada una pueda tener su momento de lucimiento dentro de esta historia coral de secretos, lealtades, historias de juventud y problemas del presente, donde volverán a buscar el apoyo del grupo para poder sostenerse. El equipo de actrices realmente hace una sinergia perfecta y particularmente Belén Cuesta puede trabajar en un registro diferente mientras que Atienza atraviesa por diferentes tonalidades a través de los capítulos de la historia.

A través de los seis episodios de esta nueva miniserie, el ritmo de thriller hará que cada una de ellas sea víctima y victimario, potencial culpable de lo sucedido o perjudicadas por los acontecimientos de ese pasado oscuro. Pero el drama le gana al misterio en los momentos más logrados de la serie con algunos giros que no sostienen el verosímil y que debilitan el curso de una historia plagada por las casualidades y los infortunios.

Pero el sexteto protagónico –al que se suman las actrices que las representan en su adolescencia que también logran trabajos muy sólidos y Lorena López (a quien vimos en “Cinco Lobitos” y “Amor en Polvo”-  logra sacar a flote esta historia de secretos escondidos y de liberación de la opresión del pasado, al mismo tiempo que muchas de ellas logran volver a ese reencuentro reafirmando una nueva identidad, con la cámara de Roquet haciendo brillar a cada una de ellas.

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