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Por Marcelo Cafferata

Como una mezcla perfecta entre “Y si vivimos todos juntos?” la película en donde Jane Fonda, Pierre Richard, Geraldine Chaplin entre otros planeaban compartir una casona en el momento de su retiro con “Tumbas al ras de la tierra” donde el encubrimiento de una importante suma de dinero genera tensiones y alianzas entre los protagonistas, se estrenó en Flow “EL BUEN RETIRO”, la ficción creada por Martín Kweller en donde se da lugar el drama, el suspenso y también la comedia.

Lejos de las historias de grupos adolescentes, romances prematuros y jóvenes con conflictos propios de entrar en la madurez, uno de los puntos sobresalientes de esta propuesta es poder ver a cuatro actrices antológicas en los roles protagónicos, demostrando que una historia con personajes que pasan los 70, también puede tener atractivo e interés.

Cuando Norma (Mirta Busnelli) queda postrada en un coma inducido en  una internación domiciliaria, su hijo Martín (Luciano Castro abandonando una vez más el rol de galán como ya demostró este año en “El primero de nosotros”) deberá debatirse entre trasladarla a un sanatorio debido al alto costo que implica esa terapia dentro de su casa o cumplir con el deseo de su madre de pasar sus últimos días junto con sus amigas de toda una vida.

Julieta (Betiana Blum), Lili (Claudia Lapacó) y Elsa (María Leal) compartirán estos días en esta casa que tiene la capacidad de darle albergue a todas ellas, aunque deberán lidiar con los roces que implica esta convivencia en tanto esperan que Norma mejore y se despierte de su sueño inducido. A la mezcla propuesta de drama y comedia se le suma una subtrama de suspenso ya que todas las amigas saben que, de un vínculo que Norma ha tenido después su viudez, la casa esconde –¡vaya a saber en qué lugar!- una importante suma de dinero no demasiado bien habido, que las tres amigas están ávidas de encontrar, cada una por diferentes motivos y pulsiones.

Los enredos y complicaciones se seguirán sumando mientras, a través de múltiples flashbacks, vamos conociendo cada una de las historias donde no faltarán los secretos, mentiras, rencores y reproches que irán saliendo a la luz, a lo que se suma la presión de la mujer de Martín (Mercedes Scápola) de sacar a las amigas de la casa para poder ponerla inmediatamente en venta, y no tardará en aparecer este nuevo amor de Norma (Gustavo Garzón) que necesita recuperar el tesoro escondido en la mansión, junto con algunos de sus secuaces que lo persiguen para dividirse el botín.  

El guion de Pedro Levati y Rodo Servino desarrolla las historias de cada una de las cuatro protagonistas, trazando perfiles bien diferenciados, permitiendo que cada una de estas cuatro grandes actrices que protagonizan “EL BUEN RETIRO” construyan sus personajes y den vida a estas cuatro amigas muy temperamentales.

Betiana Blum es la más chispeante, explosiva y la que tiene uno de los secretos más desestabilizantes frente al grupo: su Julieta es una mujer en aprietos económicos que no quiere resignar sus gustos y su buena vida a pesar de su magra jubilación y que cualquier suma de dinero la ayudaría a salir de su crisis. Elsa lleva consigo cierto resentimiento, cierta amargura  provocada por el distanciamiento de su hija, que no le permite vincularse con su nieta, situación que le permite a María Leal componer a esa fumadora empedernida, dando rienda suelta a su aspecto más agrio y más irónico con el toque que ella sabe darle a su personaje.

Mirta Busnelli es Norma, la dueña de la casa quien a través de flashbacks y de su voz en off, se convertirá en la narradora de esta historia, desplegando una gran cantidad de detalles y situaciones que le permiten una vez más a Busnelli lucirse tanto en el drama como en la comedia con la misma precisión.

El cuarteto de actrices protagónicas es realmente brillante pero Claudia Lapacó se destaca con una Lili que sobresale por sobre sus compañeras tanto por su delicadeza como por el tono que le imprime a esa inmigrante que ha atravesado el dolor de la guerra y que también fue diezmada por tragedias más recientes como la de la AMIA y que, a pesar de todo, sigue mirando su vida con optimismo y buen humor: Lapacó entrega todo en una composición absolutamente exquisita.

La gran apuesta de Kuarzo completa su elenco Mónica Cabrera (que compone a una empleada de la casa cómplice y entrometida, con momentos desopilantes), Andy Kusnetzoff como el agente inmobiliario, Raúl Rizzo como el padre confesor de Norma, Brenda Gandini, Iván Moschner y Renato Quattordio, y a través de sus ocho capítulos brinda una propuesta diferente a todo lo disponible actualmente en plataformas, sobre todo brindando la posibilidad de ver a cuatro actrices de enorme trayectoria como protagonistas de esta historia que tiene todos los elementos para transformarse en un gran éxito.

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