Tiempo de lectura: 3 minutos

Por Marcelo Cafferata

El ciclo “Invocaciones” se propone generar un diálogo entre las concepciones escénicas de directores porteños de la actualidad con otros del Siglo XX de forma tal de generar un encuentro entre dos poéticas de la dirección. La idea, en definitiva, es que un director de hoy logre escenificar uno de los íconos de la historia, repensándolo, discutiéndolo, reflexionando sobre su obra, poniendo todo su espíritu y su esencia, en escena.

La dramaturgia de Mariano Llinás y Laura Paredes se ocupa de invocar a la figura de Federico García Lorca cuya obra es la definición misma de duende, siendo considerado el poeta español que ha tenido mayor influencia y popularidad en la literatura española del siglo pasado y quien se definió a sí mismo como “católico, comunista, anarquista, libertario, tradicionalista y monárquico”.

La posibilidad de llevar a Lorca a escena, no responde a ninguno de los cánones clásicos: ni interpretando fragmentos escogidos de sus obras ni tampoco reinterpretándolas en alguna nueva versión, sino que Llinás y Paredes plantean el homenaje y la invocación a través de la figura de dos conferencistas, fervientes investigadoras de la obra lorquiana, que se encuentran en plenos preparativos de sus ponencias que se desarrollarán en una plaza de toros en Almería. Allí se darán encuentra también el ayudante de una de las docentes y el personal de la plaza que colaborará para montar todo lo que las investigadoras pidan para desarrollar sus exposiciones.

A medida que las catedráticas saquen a pasear sus egos, sus rencores personales y algunas cuentas pendientes que salen rápidamente a la luz, Lorca se hará presente de dos maneras diferentes: primero en el arquetipo de cada una de ellas que se conectan directamente con las heroínas lorquianas y sus principales características. Por el otro, mientas cada una de ella describa diferentes aspectos en la obra de Federico y los asistentes vayan colaborando en la representación de algunos versos, Lorca toma vida en escena desde sus propios textos.

La propuesta más interesante en la dramaturgia de Paredes y Llinás es (re)construir el universo de la tragedia con mucho humor, llevando a los personajes de las dos conferencistas hasta los límites del absurdo con un toque agrio de ironía y sarcasmo cuando disparan dardos certeros entre ellas, tratando de dañar sus vanidades y dinamitando su arrogancia.

Pero más allá de que estas dos poderosas mujeres acaparan toda la atención, en ningún momento Lorca se pierde de la escena: no solo porque ellas conocen apasionadamente cada detalle de su mundo que han investigado durante años, sino que además parecen llevar esos versos en su sangre, lo que además se verá reforzado en la figura de sus asistentes.

El rol de las dos expertas está a cargo de las brillantes Claudia Cantero y María Inés Sancerni, ambas en estado de gracia, apropiándose de un texto complejo al que dotan de naturalidad e histrionismo y ellas mismas se convierten en una permanente referencia a Bernarda Alba, Doña Rosita la Soltera, Yerma y Mariana Pineda. Cantero y Sancerni se sacan chispas en un duelo actoral absolutamente disfrutable, perfecto y en el que ambas, conociendo exactamente el juego, se potencian, se nutren y van consolidando su trabajo cada una con ayuda de la otra.

Los colaboradores (a cargo de Manuel Attwell, Agustín Gagliardi y Nicolás Levín) serán los encargados de ir recitando el romancero gitano a medida que avanzan con los preparativos de la disertación y se sumarán, indirectamente, con los debates que se abran acaloradamente acerca de distintas miradas sobre Lorca e inclusive, sobre su obras menos conocidas como es el ejemplo de “El Público”, una obra que fue tildada de surrealista y que fue estrenada más de 50 años después de su muerte en la que hablaba de los deseos homosexuales (reprimidos) y el erotismo.

Dentro de las propuestas disruptivas que propone el ciclo “Invocaciones”, Paredes y Llinás logran traer a Lorca al escenario desde su creatividad y con suma originalidad, demostrando que otro interesante punto de vista es hacerlo desde el humor y generando ansias de volver a acercarse a sus textos y seguir profundizando en una de las obras más bellas de la literatura española.

“LORCA / EL TEATRO BAJO LA ARENA”

Dramaturgia: Mariano Llinás  – Laura Paredes

Dirección: Laura Paredes

Con Claudia Cantero – María Inés Sancerni – Mauel Atwell – Agustín Gagliardi y Nicolás Levin.

EL PORTON DE SANCHEZ – Sánchez de Bustamante 1034 – Lunes 20.30 horas.

Compartir en: