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Por Rolando Gallego

Tras presentarse en el último BAFICI llega a los cines del país, Uruguay y México la primera película como realizadora de la reconocida actriz Dolores Fonzi. No es casual que esta original y fresca historia sobre una madre y su hijo (Toto Rovito) haya salido de su cabeza con un guion coescrito junto a Laura Paredes. Acompañada por Leonardo Sbaraglia, Rita Cortese y Carla Peterson, Fonzi logra un debut brillante como directora, además de dotar de verdad a su Blondi, la madre de Mirko (Rovito) a quienes seguiremos en la historia. Hablamos con Fonzi a horas del estreno de la película.

¿Cómo hiciste para trabajar con Toto Rovito ese vínculo tan hermoso que vemos en la pantalla?

Básicamente estuvimos mucho tiempo juntos. Creo que la parte linda de ser actor y de tener que inventar estos vínculos es que la manera de trabajarlos es estar con la otra persona y pasarla bien. Te tenés que hacer amiga de tu amiga en la película y bueno, te hacés amiga. Tenés que ser la madre del joven, que son amigos, te hacés amigo. Esa es la parte más divertida que hay. Nuestro primer ensayo fue ir al supermercado. Un día llegó, yo tenía que ir al supermercado, sí o sí, cumplí a mi hija, a la fiesta, no sé qué. Acompañame al supermercado y ese fue el primer ensayo.

¿Qué compraron?

Compramos todo lo de una fiesta infantil.

¿Fue al cumpleaños después?

No, pero pasó un año de eso, que fue uno de mis hija y este año casi viene. Estuvimos mucho juntos, entendernos, poder romper como la barrera de lo íntimo y poder decir las cosas. Y aflojar, no sé, como uno, para poder dirigir además tenés que, primero ser amoroso, como que el otro tiene que estar tranquilo para que eso pase. Igual el vínculo que formamos, ya venía de antes porque él había hecho Argentina 1985, entonces por Santiago yo ya lo conocía, pero cuando quedó en la película, bueno sí, fue eso, fue estar juntos, hablar, ensayar, leer, ir a lo de Carla, tomar vermut con Rita, o sea, empezar a armar todo este mundo. Esa familia.

Contame un poco cómo fue la creación de los personajes…

Surgió en el guion, en el 2017 empezamos a escribir con Laura Paredes, yo había leído una novela que me había inspirado una imagen de una madre y un hijo solos. Quería trabajar sobre eso y después no pude evitar llevarlo hacia la comedia que es como siento que es el registro que más fácil me sale. Y entonces algo de que conviven, que son roommates pero que él es más maduro que ella, algo de Big Lebowski mujer, algo de una persona como un poco fuera del sistema pero que a la vez está súper presente con el hijo y al hijo no le falta nada y todo se lo armó para que a él le vaya bien y es buena madre. Porque si entrábamos en algo de lo oscuro de una madre medio fuera del sistema, que también podría haber sido, bueno, era otro registro y nada que ver. Era como poder eso reírnos y hacer de un pequeño problema ese desenlace que tiene la película, donde después, bueno, no voy a contarlo. Pero surgió de ahí, de esa idea de trabajar de una madre y un hijo y de invertir un poco los roles y de hacerlo, en realidad, no solo invertirlo, sino hacerlo más horizontal y que son pares, ¿no? eso me parecía ya una síntesis de comedia buena, como hija, madre, hijo, que por ahí es hija, padre, y como no se sabe bien, empezar a trabajar sobre eso.

Hay una frase que está en la canción de la película que es “hice todo mal pero está todo bien”, reflexionando sobre que nos obligan a hacer todo bien y después hay veces que está todo mal… ¿cómo surgió esta idea?

Es una buena síntesis porque desde afuera vos podés decir una madre porrera que solo se interesa por su hijo, digamos, como que su plan, su mejor plan es el hijo, que su vida íntima y su vida personal está totalmente tomada por esa realidad que prefiere vivir, que es el plan del día a día, ir a ver una banda, como que el juicio externo hacia y puede haber miles. Pero siento que la película, como el primer día, cuando vos fuiste a verla, se acercó una madre que tenía una hija y me dijo que me tocó mucho la película porque yo fui madre adolescente. Y a la vez también porque la película deja una sensación de que hay que ser feliz con lo que uno tiene. Y me dejó como que es lo que pasa con las películas, la haces, la editás, después hablas sobre la película y la gente viene con sus devoluciones, con su subjetividad sobre la película y terminás de entender cosas que no tenés ni idea que eso iba a pasar con la película. Y es verdad que hay algo de la película que es que no importa que ella sea, no hay un juicio, como decía Toto hace un rato. No hay un juicio. O sea, el único personaje que juzga creo que es Blondie. Y Blondie no soy yo, sino el público. Y que el público, al sentirse relajado, porque el que juzga es Blondie, que es la protagonista, entonces puede jugar tranquilo y todos los juicios que se podrían ejercer sobre las cosas que pasan en la película se los ahorran porque ya están en la película. Juzga a la hermana, juzga al dealer de porro, o sea, todo lo que va pasando, juzga a la madre con no sé qué, o sea, juzga todo lo que va pasando. Entonces, como que el público siente que no tiene que entrar en esa lucha de ver quién es si está de acuerdo o no con Blondie, porque Blondie justamente expone todos los problemas que uno podría tener con las cosas que pasan en la película. Eso también me di cuenta después. Todo es como que se va armando, como que hay una manera de ir, o construyendo, que después termina siendo esta y que no sé, por eso siento que te podes divertir y, después, cuando estás divertido, te emocionas.

¿Y fue difícil configurar todo para que termine haciendo lo que vemos en la pantalla?

Por suerte, el cine y todo, creo, bueno, el cine es un trabajo colectivo y no estoy sola, o sea, no estuve nunca sola haciéndola. No solo los actores, sino el equipo técnico es un equipo técnico de lujo. La sensación de agradecimiento constante de que un montón de gente está haciendo posible esa idea que uno tuvo en algún momento y ese guion es única. Entonces, ¿cómo se dio? es paso a paso, o sea, tenés que ir confiando, es raro, es como un acto de fe hacer una película, tenés una idea, tenés que confiar en que te van acompañando bien las personas que elegiste para que te acompañen en ese camino y se van juntando las partes y en un momento sucede la película y después la película no termina cuando se terminó la película sino cuando se muestre, cuando la gente la ve y la película va a seguir viva durante mucho tiempo, o sea, toda la vida, si alguien ve Blondie dentro de 5 o 10 años va a seguir, algo va a pasar. Fue hermoso.

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