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Por Marcelo Cafferata

LLAMEN A JOE

Artes y Oficios

Encontrar el personaje perfecto para retratar en un trabajo documental no suele correr siempre la misma suerte. Algunos directores creen haber encontrado el candidato ideal (muchas veces derivado de su entorno familiar o de una historia potente que quieren llevar a la pantalla) pero no son muchos los que logran.

Hernán Siseles ha encontrado el personaje perfecto para su ópera prima : hablamos de Albino “Joe” Stefanolo, más conocido como el abogado al que han acudido una infinidad de estrellas de rock y que ha militado sobre los derechos de la cultura cannábica (como su participación en el caso Bazterrica que fue el que marcó una importante Jurisprudencia), pasando por la defensa de ciertos derechos en plena dictadura.

La figura de “Joe” es descripta por amigos y conocidos subrayando sus señas particulares y su icónico perfil: barba, pelo largo, muy largo, los testimonios que van construyendo el rompecabezas del Dr. Stefanolo lo mencionan como un “don Quijote moderno” o “Jesucristo de saco y corbata”. Rompiendo todos los cánones esperados de un profesional de la justicia –por momentos parece más un metalero que un abogado penalista o insiste en no usar celular y que todo el mundo lo llame a su casa o al Estudio-, Joe ha dejado sus sueños de cantar en una banda y ser una estrella de rock para ser un verdadero rock star dentro de los Tribunales.

Conocido como “El abogado del rock” fue convocado por los principales personajes y bandas del rock nacional en pleno apogeo. Pasaron por su estudio Andrés Calamaro, Luca Prodan , Fito Paez, Joaquín Levinton o Pipo Cipolatti, casos en los que el rock fue emparentado por los excesos, el consumo y algunas sustancias non sanctas (donde eran frecuente errores tan burdos como confundir el cloruro de amonio que usaban los técnicos con cocaína)  y hasta llevaron junto con su mujer, el expediente del divorcio de Charly García con María Rosa Yorio.

El ritmo ágil que imprime Siseles mas el indiscutible carisma y atractivo que tiene la figura de Stefanolo, hacen que “LLAMEN A JOE” sea de esos documentales que se ven de un tirón y de los que uno quisiera seguir viendo más. Nos deja un retrato de un profesional comprometido con los derechos de los músicos que han sufrido persecuciones a partir de cierto prejuzgamiento y estigmatización y de una trayectoria que supera las cuatro décadas con participaciones en diversos medios y una activa carrera en el poder judicial.

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