Por Marcelo Cafferata
La ciudad de Nueva York da el marco idea a la historia de Carter (el rapero Joey Bada$$), quien tiene una cita de sexo ocasional de la que despierta a la mañana siguiente y mientras intenta volver a su departamento –donde lo espera su fiel mascota- tendrá problemas con el policía que vigila a la salida del edificio.
Un malentendido, una reacción inapropiada del policía y todo desata una escalada de violencia que termina en muerte. Pero como si despertara de una pesadilla, Carter vuelve a aparecer en la cama y el loop, con algunas variaciones, vuelve a repetirse una y otra vez.
Los ecos de la reciente muerte de George Floyd parecen haber sido la inspiración de este trabajo de los directores Travon Free y Martin Desmond Roe que, apelando al conocido recurso de la repetición de “Groundhog Day / Hechizo del tiempo”, intenta transformar esta historia con toques de comedia, en un fuerte alegato sobre el racismo que sigue imperando en todo Estados Unidos, como un problema que se repite cíclicamente, sin poder encontrar una solución concreta.
Aún en el mensaje demasiado obvio que se pretende esconder dentro del tono de fábula moral, “DOS COMPLETOS DESCONOCIDOS” acierta en un formato diferente, exento de dramatismo, para poder volver a reflexionar sobre el flagelo de la discriminación, la justicia por “portación de cara”, la fuerte represión policial y el abuso de poder.
