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Por Marcelo Cafferata

GAMBARO

de Jazmín Bazán

Qué mejor que escuchar el pensamiento de la propia Griselda Gambaro  mientras es entrevistada para “GAMBARO”, el documental de Jazmín Bazán que lleva su propio nombre y recorre algunos de los puntos más importantes de su carrera, no sólo como la escritora de algunos de los libros más emblemáticos de la literatura argentina contemporánea sino fundamentalmente como dramaturga, una de las pocas miradas femeninas que en plena dictadura había puesto en escena textos emblemáticos que desafiaron el terror sembrado por la Dictadura.

El pensamiento de Gambaro, una joven autora de más de 90 años, es de una lucidez y de una contundencia impresionante al mismo tiempo que se conduce con una humildad y una sencillez únicas. Se ríe inteligentemente de lo que muchos llaman proceso creativo, para ella es un proceso de trabajo. Gambaro se piensa como una obrera literaria: cada idea y cada texto parte de una rutina de trabajo, muy lejos del ideal de la musa inspiradora, dejando en  claro que cada una de sus novelas y sus obras de teatro han surgido a lo largo de tantas décadas de trayectoria, de un intenso trabajo que parte de la observación del mundo conocido, de su propio territorio.

Jazmín Bazán trabaja su documental en otros dos planos además del testimonio de la propia Gambaro. Por un lado, la parte menos lograda, con una construcción de ficción que rescata algunos de sus textos leídos por una voz en off que no logra transmitir la potencia de esta autora única o que se proyectan en pantalla con intertextos pero que no tienen la fuerza de la palabra puesta en acto en el papel o sobre el escenario. Por el otro, y es aquí donde el documental gana mucha fuerza, con los testimonios de quienes la han conocido en profundidad como la actriz Cristina Banegas, la directora teatral Laura Yusem y Daniel Divinsky, director de la reconocida Ediciones de La Flor, que ha sido una de las primeras editoriales que han publicado los textos de Griselda en plena dictadura.

Divinsky reconstruirá particularmente, el episodio cuando en 1977 en plena dictadura se prohíbe el libro infantil “Cinco dedos” y se dispone su arresto por ser su editor. Estando en prisión (con más de cuatro meses detenido) se entera de la prohibición de “Ganarse la muerte” una de las obras cumbres de Gambaro, también editada por su sello. Paradójicamente a sus escritos valientes, comprometidos, militantes, Gambaro afirma que “la gran pasión de mi vida ha sido el miedo”.

Banegas, por su parte, además de trazar un retrato exacto de Gambaro, rescata la impactante puesta de una de sus obras más emblemáticas: “El Campo” bajo la dirección del genial Alberto Ure, en donde la voz de Gardel sobre el final cantaba «Silencio en la noche” y el disco se rayaba en el verso “peligra la patria”, una absoluta genialidad y una fuerte toma de posición en pleno Teatro Cervantes.

Gambaro, logró destacarse en diversos registros literarios, transmitiendo en todos ellos esa mirada crítica sobre las desigualdades sociales y una de las primeras escritoras que planteó temáticas de género en sus obras y tal como afirma la propia Banegas, ha llegado a tener una mirada premonitoria de los temas que luego fueron apareciendo.

“La Malasangre” “La Señora Macbeth” “Querido Ibsen: soy Nora” o “Puesta en claro” son algunas de sus obras teatrales que se mencionan a lo largo del documental, entre las tantas otras que aparecen en su vasta carrera como dramaturga mientras que entre sus novelas ella misma recuerda lo difícil que ha sido encontrar el título perfecto para “El mar que nos trajo” y también aparecen la vigente y oscura “Ganarse la muerte” –a más de cuarenta años de su publicación original- o ·”Después del día de fiesta”, testimonios de una pluma única, precisa, visceral y privilegiada que sigue siendo una de las más importantes dentro del movimiento contemporáneo.

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