Por Marcelo Cafferata
La plataforma Puentes de cine (www.puentesdecine.com) renueva su cartelera de cine virtual dedicado a las películas de cine arte con la Opera Prima del chileno Gonzalo Maza, de reconocida trayectoria como guionista en trabajos como “Una mujer fantástica” y “Gloria” del reconocido Sebastián Lelio, participando además del guion de “Gloria Bell”, la adaptación hollywoodense protagonizada por Julianne Moore.
En este caso, Maza no solamente es el auto de la historia sino que también se pone detrás de las cámaras para hacer su debut con un relato intimista que habla del amor en sus diversas formas y se enfoca en este punto de giro que sucede superados los treinta, en donde la vida parece comenzar a exigir ciertas tomas de decisiones que parecen ser determinantes y que irán marcando el futuro.
“ELLA ES CRISTINA” ya desde su título presenta a su personaje principal pero desde una mirada externa, fuera de la primera persona. Es su amiga Susana quien nos va presentando la historia y nos permitirá ir conociendo a Cristina a través de su voz, de su narración y de los momentos compartidos. Maza nuevamente demuestra su sabiduría para explorar con simpleza pero con suma profundidad el universo femenino como ya lo ha hecho en sus trabajos anteriores, y logra, mediante pequeñas viñetas cotidianas, ir dibujando un retrato generacional cálido y transparente.
Momentos de crisis, tomas de decisiones, vueltas impensadas que aparecen en ese momento de incertidumbre que marca el paso de la juventud al mundo adulto, son los ejes sobre los que se mueve el presente de Cristina (a cargo de Mariana Derderián) quien se apoya en su mejor amiga Susana (Paloma Salas) para poder atravesar todo este proceso en donde se siente una sensación permanente de coquetear con el delicado equilibrio entre fracaso y felicidad en cada una de las determinaciones.
Hay varios elementos que Maza explora que hacen que una historia con un planteo simple y que ya sido contada por otros directores, siga generando interés en el espectador. Por un lado, un radiante blanco y negro acompaña las desventuras de las protagonistas y le da un particular tono a la historia. Por el otro, la química en pantalla y los destacados trabajos de Derderián y Salas, son los puntos más fuertes de esta historia anclada en el mundo femenino en donde el clima de sororidad que se genera entre ambas, le imprime ese toque de verosímil y espontaneidad que realza la puesta.
En “ELLA ES CRISTINA” sobrevuela a modo de homenaje o referencia, ese clima de cine independiente americano cultivado hábilmente, por ejemplo, por las heroínas de Noah Baumbach (sobre todo en sus trabajos junto a Greta Gerwig), aunque, en este caso, Maza las dota con un tono bien local de modo tal que sus personajes tenga un toque propio, especial.
Una película dedicada a un retrato detallista del mundo femenino en donde los personajes masculinos aparecen como desdibujados y obsesionados por mirarse a sí mismos sin empatizar con ese mundo al que parecen no tener herramientas para acceder. Así, se privilegia el vínculo de amistad entre Cristina y Susana, que se presenta como el espacio de complicidad y comprensión, de contención y acompañamiento.
Maza en su guion no apuesta a las grandes sorpresas ni a escenas que escapen al simple cotidiano: su habilidad descansa en darle una mirada sin prejuicios a cada una de las decisiones que va tomando Cristina y acompañarla, con su cámara y sus diálogos, en un proceso donde encontrar un nuevo equilibrio se presenta como todo un desafío.
Con el marco de la ciudad de Santiago como tantas otras veces lo ha sido Nueva York, Paris o Los Ángeles, Maza se adentra en los conflictos generacionales en un momento donde toma relevancia el hecho de asentarse con una pareja, la decisión de ser madre, encontrar un equilibrio familiar (magnífica descripción del vínculo con la madre de la protagonista, absolutamente encerrada en su propio mundo, mirando su ombligo sin poder registrar a su alrededor) y la posibilidad de sostenerse económicamente: todas esas “presiones” del mundo adulto, que las protagonistas deben resolver con las mejores herramientas con las que cuentan. Maza, con su cámara y su texto, las acompaña amorosamente en ese tránsito por momentos agridulces y otros iluminados, por angustias y dudas, por la vida misma que las atraviesa.
POR QUE SI:
» Maza nuevamente demuestra su sabiduría para explorar con simpleza pero con suma profundidad el universo femenino «