Por Rolando Gallego.

Recién instalado en España en donde varios proyectos en cine y televisión lo convocan, Juan Grandinetti estrena «NI HEROE NI TRAIDOR», de Nicolás Savignone, en donde encarna a un joven atravesado por el dolor de una guerra innecesaria y nefasta, y espera el estreno de «GIRO DE ASES» , de Sebastián Tabany.
¿Por qué te fuiste a España?
Filmé una coproducción allá el año pasado, tenía pensado ya ir desde antes, y justo mi deseo fue acompañado por algo concreto, estuve en Madrid, y la experiencia me gustó mucho, volví para resolver algunas cosas y tomé la decisión de ir allá y aparecieron varios proyectos, filmo en Marzo y espero que comience a darse una cadena de trabajos en ambos países.
¿Tu idea es ir y venir?
Sí, estoy dispuesto a ir y venir, pero mi idea es primero estar un tiempo allá para establecer vínculos y que mi nombre sea tenido en cuenta.
Este año tenés dos proyectos para estrenar, ¿fue difícil tomar la decisión sabiendo que no ibas a estar para acompañarlas?
La decisión la tomé tratando de abstraerme de todo, porque si no siempre excusas para postergar aparecen y se pierde el vértigo de irte, soy consciente que acá soy conocido pero quiero irme a probar suerte sabiendo que hay muchos proyectos allá que pueden salir.
¿Cómo fue encarnar a Matías en NI HEROE NI TRAIDOR alguien al que le pasan muchas cosas internas?
Todos los roles son desafiantes, pero acá hay cuestiones que no se sabe cómo vivieron estos chicos eso, creo que es difícil llegar a lo que le pasaba a cada uno de los combatientes, me pareció atractivo para contar qué le pasaba a estos chicos con el llamado, la película indaga sobre ese momento, el deseo de ir, el deseo de no ir.
Ese deseo algunos lo resuelven de diferentes manera ¿cómo fue trabajar con los compañeros?
Tuvimos bastantes ensayos, porque además de recibir la noticia había que encararla, ver cómo se trabajaba esto en la familia, ver la idea de propaganda de amor a la patria, y la idea de patria. Trabajamos mucho también entre todos para que los vínculos sean verosímiles.
¿Cómo fue volver a trabajar con Inés Estévez?
La conocía desde Te esperaré, nos llevamos muy bien desde entrada, ella es muy generosa y con experiencia, trabajamos muy bien, y desde el primer encuentro me quedé tranquilo porque pudimos crear un código para el rol.
Más allá del guion, ¿qué trabajo de investigación hiciste para reflejar la época?
Hice un trabajo de investigación sobre la época y sobre la guerra, la parte crítica, porque si bien la guerra está presente, el desafío fue reflejar la época y cómo recibían estos chicos y sus familias la noticia, también hay algo de la música con el personaje, y que por suerte yo ya conocía, porque es música que se escuchaba en mi casa, igual la idea no era sobrecargar de información a los personajes.
La película posee un mensaje que disuade a la gente sobre la guerra y los conflictos bélicos ¿cómo crees que será recibida?
La película habla sobre personas, con sueños y cómo esos sueños se desvanecen ante hechos ajenos a ellos, ojalá permita pensar sobre cómo se podría haber evitado una guerra, porque sacude no sólo a los que van sino a todos lo que lo rodean, es importante para evitar el olvido, el tiempo ayuda a cicatrizar pero también a olvidar, y no hay que olvidarse de esto. Espero que la gente se interese por un tema que hace a nuestra identidad, que sirva para concientizar, para conocer nuestra historia, para que el que no lo vivió pueda entender qué vivieron los que sí lo hicieron en esa época y amigarnos con esa situación.