Tiempo de lectura: 2 minutos

Por Marcelo Cafferata

Así como este año Sean Baker abordó tangencialmente el mundo del porno desde la mirada de su protagonista masculino en “Red Rocket”, la directora sueca Ninja Thyberg aborda en su ópera prima, esta misma industria pero desde el punto de vista de una joven de 19 años deseosa de ingresar al negocio.

Cuando llega a Los Ángeles, el oficial de inmigraciones le hará la famosa pregunta, “Negocios o placer? / Business or pleasure?” que, aunque parezca una pregunta trivial marcará profundamente el recorrido de la heroína de “PLEASURE” donde el ingreso al negocio de la pornografía no será todo lo idílico que ella soñaba.

Bella (impresionante tour de forcé de Sofia Kappel) exuda sensualidad y cree, inocentemente, que podrá dominar el mundo del porno tal como domina sus publicaciones de Instagram repletas de comentarios sin saber el duro camino que le espera para poder ganar su lugar en la industria.

La mirada de la directora pone de relieve una marcada  postura femenina que fija territorio para un mundo dominantemente masculino y misógino, donde la figura de las mujeres tiene incluso, un lugar de objeto, de cosificación frente a una violencia masculina que toma las riendas del negocio, aun cuando ya existe todo un movimiento de películas porno dirigidas por mujeres en donde las protagonistas tienen un lugar diferente.

Bella aspira a una vida llena de glamour, fama y una vida económicamente holgada y para lograr su objetivo los productores la llevarán a una espiral vertiginosa en donde rápidamente se encontrará filmando escenas mucho más extremas de lo que ella pensaba sostener (una fuerte escena de sexo violento es bastante difícil de digerir), rompiendo con sus propios límites éticos y planteando un dilema moral sobre una explotación consentida.

Hay muy poco humor en la mirada de Thyberg. Elige, por el contrario, una mirada amarga, extrema e impiadosa donde si es necesario utilizará el sexo explícito como arma, pero también en muchas otras ocasiones, elegirá inteligentemente los fuera de campo, los límites borrosos y algunas insinuaciones, para ir acompañando el duro proceso de deshumanización al que Belle se somete sin dar demasiado respiro.

La dupla Thyberg / Kappel logran un muy buen equipo y trabajan el relato en diferentes capas para poder, inclusive, mostrar tras bambalinas algún aspecto más íntimo y humano de los actores a pesar de que no abandona en ningún momento la tristeza, la desilusión y la desesperanza que invade a Belle: el famoso precio de la fama.

Compartir en: